Harry Potter: libros vs películas
- raulgr98
- 9 ago 2023
- 3 Min. de lectura
¡Bienvenidos pasajeros! En esta edición de la gráfica del mes me pareció interesante la duración de las películas de Harry Potter (en minutos) y la extensión de los libros (en páginas de la edición original), pues creo que puede arrojar luz sobre las dificultades del proceso de adaptación. En la gráfica podrán ver la comparación entre ambos rubros, considerando que para el metraje de la adaptación del último libro (que se dividió en dos películas) sumé la duración de ambas, que es de 146 y 130 minutos respectivamente (135 y 118 sin créditos). Posteriormente, en la tabla podrán ver una división en la que se puede hacer una aproximación del índice de páginas por minuto tomando en cuenta los valores de metraje sin créditos.

| |
|---|---|
Historia | Páginas por minuto |
Piedra filosofal | 1.55 |
Cámara secreta | 1.65 |
Prisionero de Azkaban | 2.44 |
Cáliz de fuego | 4.42 |
Orden del fénix | 5.99 |
Principe mestizo | 4.22 |
Reliquias de la muerte | 2.40 |
La observación inicial que se puede hacer de estos resultados es que el proceso de adaptación se volvió cada vez más complejo conforme se avanzaba en la franquicia, simplemente por el número de páginas. Esto se debe a que mientras los libros enfrentaron un salto considerable en extensión entre el tercer y cuarto volumen (prácticamente duplicándose), las películas permanecieron sorprendentemente constantes en cuanto a metraje, pues hay tan sólo 23 minutos de diferencia entre la película más larga y la más corta. Otro ejemplo claro de los problemas que trajo consigo el incremento en tamaño de los libros es que incluso dividiendo el último en dos partes, el índice de páginas por minuto es mayor al de las dos primeras adaptaciones, aproximadamente en el mismo rango que la tercera.
Otras conclusiones que me parecen muy interesantes son los fenómenos opuestos que se produjeron en el segundo libro y el quinto. En el caso de la cámara secreta, nos encontramos con que pese a ser el segundo libro más corto, su adaptación es la película más larga, lo que nos habla de un esfuerzo por capturar la mayor cantidad posible de información del libro (ambición que comparte con la primera cinta, también dirigida por Chris Columbus). En contraposición tenemos a David Yates y su equipo, encargados de adaptar los últimos tres libros, cuya prioridad parece haber sido reducir la información literaria a lo esencial, lo cual es evidente sobre todo en la orden del fénix, que es la segunda cinta más corta pese a estar adaptando la novela más extensa. Esta comparación resulta especialmente paradójica si se considera que la segunda película, pese a ser más fiel, es considerada de las más débiles por sus problemas de ritmo (la sexta y la cuarta, que tampoco se encuentran entre las favoritas, son también relativamente largas), mientras que la quinta es casi universalmente considerada como una de las tres mejores (junto con la tercera y la octava, que son curiosamente las otras dos más cortas).
Si ustedes quieren saber mi opinión personal, creo que el triunfo de una adaptación depende no tanto de la cantidad de material que se traslada a la pantalla, sino de la calidad en la selección del mismo y el lenguaje cinematográfico empleado. Tomando como ejemplo Harry Potter, creo que el error de la cuarta y la sexta no fue su duración, sino el seleccionar subtramas poco dinámicas, dejando de lado otras que podrían capturar más la atención de la audiencia; mientras que el gran triunfo de películas como la quinta y la tercera fue descifrar los puntos claves de la historia y centrarse en ellos (algo más importante que la brevedad por la brevedad misma). En cuanto a las últimas dos cintas, hicieron algo que no recomendaría en cuanto a dividir un libro en dos, pero que claramente benefició a la última entrega: poner todo el planteamiento y subtramas en la primera parte, que fue mal recibida al carecer de clímax, y que la segunda sea únicamente resolución, que la mayor parte de la audiencia encontró satisfactorio.
Aprovecho para cerrar con mi opinión sobre el anuncio de un remake de los libros, ahora como serie de televisión. Aunque es cierto que espaciar el contenido en capítulos podría ayudar a incorporar más material sin afectar el ritmo, me parece un proyecto muy riesgoso por motivos que son claramente observables en la gráfica: aunque claramente hay mucho potencial que quedó fuera de las películas en los últimos cuatro libros, la cercanía en duración de los dos primeros, e incluso del tercero, es tal que veo muy poco viable una adaptación exitosa: hacer siete temporadas con el mismo número de capítulos provocaría el efecto contrario que la saga de películas (en lugar de películas a las que les faltan escenas, tendríamos capítulos sin suficientes acontecimientos que narrar). Esto es prueba nuevamente que adaptar es uno de los trabajos más complejos que pueden hacerse, pues no basta con trasladar información sino comprender las ventajas y necesidades de dos lenguajes completamente diferentes.
Hasta el próximo encuentro...
Navegante del Clío



Comentarios