La vuelta al mundo en 80 días
- raulgr98
- 21 feb 2023
- 3 Min. de lectura
¡Bienvenidos pasajeros! En esta ocasión de la lectura de la semana les traigo una de las más icónicas novelas de aventura del siglo XIX: La vuelta al mundo en 80 días.
Publicada por entregas en 1872, la novela está empapada del contexto histórico, del cual no se puede desasociar. Al momento de comenzar a escribir, Jules Verne estaba padeciendo los efectos de la Guerra Franco-Prusiana, sumido en la apatía y el estrés. Abrumado, el escritor leyó en el periódico de tres avances tecnológicos que se consideran el inicio de la globalización: el ferrocarril transcontinental en Estados Unidos, la apertura del Canal de Suez y la inauguración del tren en la India. La necesidad de Verne de escapar, sumado a la posibilidad por primera vez de dar una vuelta al mundo como turista, sirvieron de inspiración para la obra.
Por que el título de la novela no da lugar a interpretación: La historia sigue al rico caballero Phileas Fogg, quien hace una apuesta con sus compañeros de club que es posible dar la vuelta al mundo en 80 días (del 2 de octubre al 21 de diciembre) y se lanza a la aventura con su criado Passepartout a la vez que son perseguidos por Fix, un detective que a confundido a Fogg con un peligroso ladrón.
Suez, Bombay, Calcuta, Hong Kong, Yokohama, San Francisco, Nueva York y Londres son las principales paradas del viaje, y en cada uno los personajes viven insólitas aventuras que involucran terribles accidentes que se resuelven de manera ingeniosa; siendo muy claro Verne en su preciso juego con el tiempo (que llega a horas ganadas y perdidas).
Primero que nada, considero importante abordar un tema delicado de la novela. Aunque históricamente correctas, las actitudes de los nativos americanos y los hindúes en la historia pueden resultar culturalmente insensibles bajo estándares modernos, por lo que recomendaría a los lectores tomarse con un grano de arena algunas de las costumbres descritas. Dejando ese aspecto de lado, creo que la historia, pese a su simpleza, aun mantiene las emociones y el carismático sentido del humor de cuando se publicó originalmente. De treinta y siete capítulos, que apenas rebasan las cien páginas en la mayoría de las ediciones, la lectura es sumamente ágil, no perdiéndose mucho tiempo en descripciones para comunicar la acción de manera atractiva y precisa.
El éxito de la novela fue tal que inspiró varios viajes similares en la vida real, muchos rompiendo el récord por varios días. En cuanto a adaptaciones, ha sido una de las piezas literarias más recreadas, pero sin duda la más icónica es la versión de 1956, que contó con Cantinflas en el papel de Passepartout y ganó cinco premios Oscar incluyendo Mejor Película.
Antes de despedirme, quiero mencionar brevemente un uso muy efectivo que puede tener la publicación de una novela por entregas, formato que ya habíamos discutido anteriormente. En el caso de la obra de Verne, se programó la publicación de los capítulos para que el último coincidiera con el final de la apuesta, lo que tuvo como efecto que muchos lectores creyeran que los personajes y la aventura eran reales, lo que aumentó la conexión del público con la audiencia y por lo tanto las ventas.
Título original: Le tour du monde en quatre-vingts jours
Autor: Jules Verne
Año de publicación: 1872
Editorial: Le temps (periódico publicación original)
Hasta el próximo encuentro...
Navegante del Clío
Comentarios