Los hombres lobo de Castronegro

¡Bienvenidos pasajeros! Como saben, soy un gran fanático de los juegos de mesa, que me parecen una fuente de entretenimiento grupal superior incluso que el karaoke y el baile. No es la primera vez que hablo de uno de mis juegos favoritos, pero en esta breve publicación quiero recomendar uno no tan famoso, que descubrí en la universidad y se ha convertido en uno de mis favoritos: Les Loups-garous de Thiercelieux, que llegó al resto del mundo simplemente como “Hombres lobo”.

Diseñado por Philippe des Palières y Hervé Marly, el juego salió a la venta por primera vez en 2001, y fue un éxito casi instantáneo en Europa, provocando futuras expansiones en 2006, 2009 y 2012. Siguiendo un estilo similar a otros juegos de estrategia como Mafia o Secret Hitler, el juego consiste en dos grupos opuestos (el más pequeño infiltrado dentro del más grande), donde ambos tienen el objetivo de eliminar al otro. Diseñado para ser jugado por un mínimo de ocho personas y un máximo de cuarenta y siete, es ideal para grupos grandes y, gracias a las expansiones, tiene un alto grado de personalización, para diseñar la dinámica que mejor se ajuste a cada fiesta.

¿Por qué me gusta el juego? Cuando traté de explicarlo a un par de conocidos, sonó más complejo de lo que en realidad es, pero he comprobado que seguir las reglas es muy sencillo tras una partida de prueba, y una vez comprendida la dinámica, activa en los jugadores habilidades de deducción lógica, estrategia y actuación de una forma inmersiva y divertida, con la variedad de roles permitiendo que cada sesión pueda ser completamente diferente, y se ajuste a la familiaridad de los jugadores con el tema.

Pero ¿por qué específicamente “Hombres lobo” y no otros similares? En parte creo que es el atractivo de las ilustraciones originales de Alexios Tjoyas, Misda y Christine Deschamps, pero siendo honesto, la primera vez que jugué fue con una versión hecha con pedazos de papel, e incluso entonces me cautivé. En gran medida se debe a mi afición por la fantasía, uno de mis géneros favoritos de ficción, y la diversidad de roles apela a mi lado coleccionista, pero creo que el factor decisivo fue el rol de narrador, pues aquellos juegos que logran ser dinámicos pero a la vez tener un alto componente narrativo, incluso llegando a incorporar elementos de juego de rol, son siempre mis favoritos, pues estimulan la imaginación y apelan a mis distintas aficiones, como la escritura creativa y la actuación.

Juntando todas las expansiones, el juego original alcanza para cuarenta y seis jugadores (9 lobos, 29 aldeanos, 3 jugadores individuales y 5 ambiguos), además de treinta y un tokens que asignan roles adicionales. Si a esto le sumas distintas variantes oficiales y un puñado de cartas de eventos, las posibilidades son prácticamente ilimitadas. Nunca he tenido dos juegos de “Hombres lobo” iguales, pero todas se han contado entre mis tardes de juego más divertidas.

Hasta el próximo encuentro…

Navegante del Clío