Titanic
- raulgr98
- 19 abr 2023
- 3 Min. de lectura
¡Bienvenidos pasajeros! El día de hoy terminamos la trilogía de James Cameron con la que para muchos es su mejor película, y sin duda una de las más exitosas: Titanic.
Escrita por el propio Cameron, y estrenada en 1997, la película fue en su momento la más taquillera de la historia (actualmente la cuarta detrás de Avengers: Endgame y las dos películas de Avatar, también de Cameron); y está empatada con Ben-Hur y El retorno del rey por el máximo número de Oscares ganados (11), siendo en el caso de esta producción Mejor Película, Mejor Director, Mejor Diseño de Producción, Mejor Cinematografía, Mejores Efectos Visuales, Mejor Edición, Mejor Diseño de vestuario, Mejor sonido, Mejores edición de sonido, Mejor Banda Sonora y Mejor Canción Original. Si se suman las tres categorías que perdió (actriz protagónica, actriz de reparto y maquillaje) se tiene el récord por mayor número de nominaciones.
Aunque fuera de sus protagonistas, muy pocos de los actores alcanzaron el estatus de estrellas, Titanic tiene uno de los elencos más completos de la historia reciente, contando entre sus miembros a Kate Winslet (Rose DeWitt Bukater), Leonardo DiCaprio (Jack Dawson), Billy Zane (Caledon Hockley), Frances Fisher (Ruth DeWitt Bukater), Kathy Bates (Molly Brown), Victor Garber (Thomas Andrews), Danny Nucci (Fabrizio), Bernard Hill (Edward J. Smith), David Warner (Lovejoy), Jason Barry (Tommy Ryan), Jonathan Hyde (J. Bruce Ismay), Bill Paxton (Brock Lovett) y Gloria Stuart (Rose Dawson), entre muchos otros, interpretando a una mezcla de personajes reales y ficticios.
Aunque no es mi película favorita de Cameron (la duración me parece excesiva), creo que es su película más madura y la mejor ejecutada, pues no sólo la transición al drama le permite mayor complejidad a la historia, sino que le permite a Cameron utilizar a su favor el factor histórico, algo muy atractivo en la época del estreno. Todos los trucos del director que comentamos en ediciones pasadas, las secuencias de acción, el tema central de su filmografía (la arrogancia humana), un muy buen uso de música (en este caso la banda sonora de James Horner y el tema emblemático de Celine Dion) y los avances en efectos especiales están aquí explorados a su máxima capacidad, pero se le agregan tres cualidades muy importantes, que son probablemente las que consolidaron su éxito en Hollywood.
El primero es un impresionante diseño de producción, que se ve realzado por efectos sociales. Poder recrear casi a la perfección la belleza y magnificencia del barco original es impresionante por sí mismo, pero a través de utilería y vestuario el equipo fue capaz de darle una identidad distintiva a cada sección del barco, lo que realza la diferencia de clases entre los personajes. Todo llega a su clímax en la entonces revolucionaria secuencia del hundimiento, que recurrió de maquetas, efectos digitales y trabajo submarino real.
Una segunda cualidad es el balance tonal y de personajes que la dirección realiza, pues permite que todos los personajes secundarios tengan un poco de caracterización y personalidad; lo que vuelve la secuencia de la banda tocando uno de los segmentos más trágicos del cine reciente sin necesidad de ser explícito. En cuanto al tono, hay acción, tragedia, sentido del humor, tensión (puesto que el espectador sabe desde el inicio que va a pasar) y erotismo, algo para todos los gustos.
Finalmente, me retuve de escribir una sinopsis porque creo que en esta se concentra la principal clave del éxito de Titanic. En su esencia, la película es la historia de amor entre Rose y Jack, dos pasajeros de distinta clase social, que triunfa gracias a la increíble química de Winslet y DiCaprio, retomando elementos arquetípicos como Romeo y Julieta. Aunque el amor no es ajeno a la filmografía de Cameron ni antes ni después, solo en Titanic es el foco real, y al desarrollarse ambos personajes a través de la relación vuelve al amor el elemento central de la narrativa. Aunque el concepto cambia de película en película, todas las historias de Cameron son espectáculos cuya raíz es una historia sumamente simple (en esta ocasión, un triángulo amoroso rodeado de calamidad), lo que pemite que todos los espectadores puedan no sólo seguir la historia sino involucrarse emocionalmente a un nivel profundamente básico, por lo cual siempre han triunfado en taquilla.
Hasta el próximo encuentro...
Navegante del Clío
Comentarios